La Red de Educomunicadores de Manabí reafirma su compromiso con la participación comunitaria y la construcción de una cultura de paz. En las últimas semanas, las redes locales de San Pablo, María Auxiliadora y Picoazá desplegaron diversas iniciativas que reflejan creatividad, inclusión y trabajo en equipo.
En San Pablo, se realizaron talleres de masculinidades saludables dirigidos a adolescentes. Estos espacios de diálogo abierto promueven relaciones respetuosas y equitativas, impulsando nuevas formas de convivencia.
En María Auxiliadora, se vivieron jornadas llenas de entusiasmo con la grabación de una demostración sobre la importancia de la inclusión educativa en niños y niñas de 0 a 5 años. También se organizó un recorrido por el barrio para invitar a la comunidad a sumarse al proyecto “La Escalinata que Soñamos”, una iniciativa que busca transformar el espacio público en un lugar seguro y acogedor para todos.
En Picoazá, la creatividad se manifestó con la grabación de la miniserie “Voces que Transforman” y la producción de cuñas radiales con mensajes de cohesión social, derechos humanos y convivencia pacífica, reafirmando el poder de la educomunicación para inspirar cambios positivos.
Cada una de estas acciones refleja el compromiso de jóvenes y líderes comunitarios por construir territorios más inclusivos, solidarios y participativos. La educomunicación se confirma como una herramienta viva para el encuentro, la cohesión y la transformación social.
El proyecto “Educomunicadores para la cohesión social, la paz y los derechos humanos” es implementado por el Centro Internacional de Estudios Superiores de Comunicación para América Latina (CIESPAL), con el financiamiento del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ) de Alemania y el apoyo de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH.
